ATV: esencial en la clínica veterinaria

21 junio 2024 -
Un perro salchicha yace tranquilamente mientras una persona sonriente le acaricia la cara. Interactúan afectuosamente en un ambiente clínico brillante.

En la actualidad, es extraño encontrar un centro veterinario que no cuente en su plantilla con al menos un Asistente Técnico Veterinario (ATV).  

Y es que, para el correcto funcionamiento de una clínica, el profesional veterinario suele requerir del apoyo de los ATV, una figura cuyas funciones contribuyen al bienestar de las mascotas, a mejorar la atención de los propietarios y a fortalecer la calidad de los servicios veterinarios prestados. 

¿Cuáles son las funciones del ATV? 

Hoy en día en España no existe el puesto de trabajo de enfermero veterinario. Para saber qué hace un enfermero veterinario debemos ir hasta Reino Unido, donde esta profesión se consigue mediante una carrera universitaria y, tras ello, es necesario colegiarse en el Real Colegio de Cirugía Veterinaria (RCVS, Royal College of Veterinary Surgeons). 

En cambio, en nuestro país, las funciones del ATV se estipulan en el Real Decreto 705/2017   

  • Atención al cliente y colaboración en la gestión del centro: manejo de agenda, venta de artículos de animales (comida, snacks, desparasitantes…), proyección de stock y realización de pedidos…  
  • Recogida de muestras biológicas y su posterior análisis de laboratorio: extracción de muestras y análisis de estas. 
  • Ayudar en la consulta clínica: anamnesis inicial, sujeción y manejo de los animales… 
  • Apoyo en el quirófano: preparación del quirófano, preparación del paciente, ayuda al cirujano durante su intervención, seguimiento anestésico… 
  • Atención de animales hospitalizados: control de constantes vitales, cálculo y administración de fluidoterapia, limpieza y mantenimiento de los animales y las jaulas de hospitalización… 
  • Asistencia en técnicas de diagnóstico por imagen: sujeción de ecografías, realización de radiografías. 

 

Importancia de la formación de los ATV 

La formación de los ATV no solo les proporciona los conocimientos teóricos necesarios, sino que también los prepara para enfrentarse a situaciones reales en un entorno clínico. Un ATV bien formado es capaz de anticiparse a las necesidades de la clínica y ofrecer un servicio más eficiente y de calidad. 

La formación dirigida a ATVs presenta diferentes niveles de profundización y diferentes especialidades, como aquella dirigida a la asistencia en centros veterinarios, anestesia, emergencias o fisioterapia entre otros. A la hora de buscar tu curso ideal, es importante escoger el centro más adecuado y que más se adapte al presupuesto y a tus necesidades. 

En Improve Veterinary Education ofrecemos programas modulares en formatos presenciales y online dirigidos a aumentar la confianza y las habilidades de los asistentes. Además, al finalizar cualquiera de nuestros cursos, podrán optar al Veterinary Paraprofessional Certificate (VPPCert) o Veterinary Paraprofessional Foundation Certificate (VPPFCert) otorgado por la International School of Veterinary Postgraduate Studies (ISVPS). Este título es reconocido internacionalmente y les ayudará a diferenciarse del resto. 

Desde IVE recordamos que, junto a una buena formación, un factor fundamental que debe acompañar a todos los ATV es la empatía hacia los animales y la capacidad de comunicarse efectivamente con los propietarios.