Todos sabemos que los gatos ocultan muy bien el dolor. Pero ¿qué podemos hacer al respecto? Aunque las escalas de valoración del dolor validadas no son algo nuevo, hay datos que sugieren que todavía no se utilizan de forma generalizada en la práctica veterinaria (1,2,3), y la falta de formación parece ser una de las causas más probables. En este artículo, repasaremos la Escala de Expresión Facial Felina (FGS), una herramienta validada para evaluar el dolor en gatos, y compartiremos recursos que te ayudarán a implementarla en la práctica clínica.
La Escala de Expresión Facial Felina (FGS, por sus siglas en inglés) es una herramienta para la valoración del dolor desarrollada en la Université de Montréal. A través del análisis de vídeos y fotografías de gatos con dolor, antes y después de recibir analgesia, los investigadores identificaron cinco rasgos faciales que diferían de forma consistente entre pacientes con dolor y aquellos que estaban cómodos. Estos rasgos son:
Desde su desarrollo en 2019, la Escala de Expresión Facial Felina ha sido validada por su fiabilidad entre distintos profesionales, cuidadores y en diferentes tipos de pacientes —por ejemplo, gatitos, gatos sometidos a extracciones dentales y aquellos que reciben sedación o anestesia—. En general, la FGS muestra una buena repetibilidad entre usuarios para la valoración del dolor agudo en gatos, y su precisión mejora aún más con formación. La escala es adecuada para gatitos y gatos que han tenido extracciones dentales, pero debe utilizarse con precaución durante los primeros 30 minutos tras la sedación o anestesia, ya que estos procedimientos pueden alterar los resultados. La FGS está recomendada por la WSAVA en su Guidelines for the Recognition, Assessment and Treatment of Pain.
Si sospechas que un gato está sufriendo dolor agudo, puedes utilizar la Escala de Expresión Facial Felina para determinar si es necesario intervenir.
Suma las puntuaciones – la puntuación máxima es de 10. Un resultado superior a 4 sugiere que puede ser necesaria la administración de analgesia, y cuanto mayor sea la puntuación, más severo será el dolor. Por tanto, puntuaciones muy altas (9 o 10) pueden requerir un enfoque analgésico diferente al de puntuaciones leves (4 o 5).
Como puedes ver, la Escala de Expresión Facial Felina es fácil de usar y muy útil para detectar dolor agudo en la mayoría de los pacientes felinos. A continuación, veremos algunos consejos para incorporar esta escala en tu práctica clínica diaria.
Imprime copias de la guía
Ten copias de la Feline Grimace Scale guide para todo el equipo. Por ejemplo, puedes plastificar una copia y colocarla en la zona de hospitalización felina, pegarla en cada portapapeles o guardarla en los cajones de las consultas. En definitiva, procura tener una copia disponible allá donde pueda resultar más útil.
Practica y forma a tu equipo
Cuanta más práctica tenga tu equipo en la evaluación del dolor en gatos, mejores serán los resultados. Resultados más precisos y consistentes permitirán tomar decisiones terapéuticas más acertadas. Por suerte, el equipo responsable de la FGS ha creado una página de práctica con imágenes de gatos que podéis utilizar para poner a prueba vuestras habilidades y detectar quién necesita más formación.
Informa correctamente a los propietarios
Aunque la FGS es útil para el dolor agudo, no debería limitarse solo al entorno clínico. Formar a los cuidadores en este tipo de evaluación del dolor es una excelente forma de hacer seguimiento, especialmente en gatos con episodios recurrentes de dolor agudo (como los que padecen FLUTD) o tras una cirugía. Dado que se ha demostrado que la FGS es fiable cuando la usan cuidadores, los resultados pueden compararse con los del equipo clínico en el día a día.
Considera usar la app
Es cierto que, como veterinarios, a veces desconfiamos un poco de la tecnología. Pero los creadores de la FGS han desarrollado también una aplicación que guía paso a paso en la evaluación del dolor. Aunque está pensada principalmente para cuidadores, también puede ser útil en las primeras fases de formación del equipo clínico.
Otras escalas de dolor felino validadas
Si la Escala de Expresión Facial Felina no se ajusta a tus necesidades, existen otras opciones validadas. Junto con la FGS, la WSAVA recomienda también la Escala de Dolor Felino de Unesp-Botucatu, que ha sido ampliamente estudiada y validada. Su versión larga es más intervencionista (incluye la medición de la presión arterial), lo que puede generar estrés en los gatos. Sin embargo, la versión corta también está validada y requiere menos manipulación, aunque aún incluye la palpación de la zona dolorida como uno de los puntos de valoración.
Otra escala validada es la Glasgow Composite Measure Pain Scale-Feline. Es probablemente más conocida (gracias a la popularidad de la versión canina), aunque no ha sido tan ampliamente investigada en gatos.
La Escala de Expresión Facial Felina es una herramienta validada para valorar el dolor agudo que resulta fácil de usar para veterinarios, auxiliares, estudiantes y cuidadores. ¿Por qué no empezar a usarla en tu clínica hoy mismo?